La semana pasada tuve mi primera cena de Navidad. Yo creo que hay vida más allá de los brillos, el oro, los vestidos negros y el paillette, o que éstos siempre pueden reinvertarse, no sé si me entendéis. Evidentemente, todo depende del lugar y estilo de la cena, y de ésta misma, pero siempre podemos darle vueltas de tuerca a cualquier estilismo que se precie.

Así que para enseñaros este look bastante informal y rojo... ¡necesitaba un entorno muy rojo! ¡Espero qué os gusten las fotos!